txat-A

miércoles, 7 de octubre de 2009

¡QUÉ GRAN LECCIÓN!

Y direis ¿por qué?
Pues bien, muchas veces habréis oído decir:”una imagen vale más que mil palabras” y este es un caso claro. A todo el mundo nos gusta ganar, pero no debería ser a costa de todo. Año tras año, intentamos inculcar a los jugadores unos valores en el campo de juego y fuera, a jugar con contrarios y no enemigos, a tener respeto a todo aquello que rodea a su deporte, a apreciar la labor arbitral con su margen de error incluído ya que no os dais cuenta que si estas PERSONAS, porque lo son, no ejercieran su labor, nuestros hijos no podrían jugar partidos, sólo existirían los campos de batalla. Tristemente muchas veces estos valores a los que me refiero pasan desapercibidos cuando comienzan los gritos provenientes de incondicionales que están en las gradas. En lugar de animar, se ceban en el señor colegiado y no ven más partido que ese. Pues bien, os presento a Haritz, jugador del Amenabar de Zarautz en categoría infantil de primer año. El pasado domingo día 4 de Octubre jugando un partido amistoso en Zumaia, en un momento dado algunos del público se pusieron a gritar y desde el banquillo se giró, gritó un ¡IXOOOOO! y dió una lección a los autores de la tangana. Si de verdad vais a los partidos por vuestros hijos que se note. No les hagáis pasar estos malos ratos. Vamos a intentar divertirnos todos y a ser más tolerantes. GRACIAS HARITZ POR ENTENDER EL DEPORTE COMO TAL.



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